Se acerca la noche de Halloween ¿Y qué mejor que preparar nuestra propia decoración en compañía de los más pequeños?
A los niños les encantará preparar su propia guirnalda de fantasmitos y colocarla en cualquier rinconcito de la casa para crear un ambiente terrorífico.
Pues venga, manos a la obra….
Para este DIY necesitamos:
-Plantilla que puedes descargar aquí
-Bolitas de porexpan de 3 cm
-Tejido blanco de algodón o una sábana vieja
-Tijeras
-Pegamento o cola blanca
-Rotulador permanente color negro
-Cordón
-Aguja e hilo
Paso 1: Imprimimos la plantilla y la recortamos.
Paso 2: Doblamos el tejido de algodón en cuatro partes y dibujamos 3 círculos con la plantilla. Recortamos y obtendremos 12 piezas redondas.
Paso 3: A continuación, cogemos las bolitas de porexpan. Encolamos media bola y la unimos a la redonda de algodón, centrada. Con la mano apretamos el tejido para que quede pegado a la bolita y un poco arrugado.
Paso 4: Una vez tenemos los doce fantasmas, pintamos a cada uno unos ojos negros.
Paso 5: Con hilo y aguja, hacemos una puntada, cogiendo un poquito de tela y un poquito de porexpan en cada fantasma. Recortamos el hilo dejando unos 7 cm de largada.
Paso 6: Por último, atamos los fantasmitos al cordón, mediante un nudo y dejando la distancia que más nos guste entre fantasma y fantasma.
Ahora solo tienes que buscar un lugar especial para colgar la guirnalda y disfrutar a tope de la noche de Halloween.
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